martes, febrero 02, 2010

Bill Fawcett. Cómo perder una batalla

Esta es una antología de batallas perdidas por error. A cada batalla se le dedican pocas páginas, de cuatro a diez, con sus circunstancias estratégicas y tácticas.

La selección de los episodios es interesante. Algunas son indudables cagadas: Cannas, Carras o el asalto a Petersburg (la batalla del cráter en Cold Mountain). Otras como Austerlitz o Stalingrado, podrían estar en cualquier recopilación de Grandes Batallas de la Historia. Se podría concluir que en general las batallas (o muchas de ellas) las ha ganado el que cometió menos errores. Sería una especie de visión clementista de la historia militar.


Por otro lado queda el lector con la sensación de que el principal error o motivo de error es el exceso de confianza en la capacidad propia o en la debilidad ajena. ¿Debería grabarse sobre las puertas de las academias militares alguna alabanza de la prudencia del tipo "El miedo guarda la viña"? ¿O está reñida la prudencia con la brillantez?

No hay comentarios: