Deploro este aspecto competitivo del debate, completamente futbolístico: concentración de los equipos, previo, post-partido, incluso hinchada y por supuesto el que piensa pierde.
¿Quien gana el debate? Que estupidez, la única manera de ganar un debate es que el oponente se eche a llorar, caiga de rodillas reconociendo su error y corra al registro a retirar sus candidatura.
1 comentario:
A mi me gustan mucho los debates. Es una detallada exposición de las carencias de los dos principales candidatos. Yo me acuerdo mucho del resto de candidatos y me pregunto si estarían a la altura de un debate así.
Y hemos sacado unos pocos chascarrillos, además de un idea exacta de la escasa credibilidad que se tienen entre ellos, la buena suerte que nos desea ZP (como gane) y esa niña obsesiva de Rajoy.
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