Deploro a los comentaristas del campeonato europeo de baloncesto. Todos tienen que ser chistosos, ocurrentes y simpáticos, no sé si decir que como Andrés Montes. Al final, y como Andrés Montes, me resultan unos idiotas insoportables. Supongo que en el fondo es un efecto más de la altura, el cerebro, el corazón y la falta de riego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario