lunes, marzo 16, 2009

Otra vez contra los autobuses

Los autobuses de Barcelona se ven con ganas de hablar de teología pero prefieren callar sobre la lingüística. Los autobuses de Barcelona, filosóficos, no quieren gastar su tiempo hablando de banalidades.

1 comentario:

Anónimo dijo...

En "el espejismo de Dios", Dawkins arguye que basta con que una materia se declare como religiosa para que el principio liberal "maximo respeto para las personas, maxima desconfianza hacia las ideas" quiebre. Si digo "el hecho X afecta a mis creencias" nadie puede discutir del hecho X sin ofenderme. Punto.

Curioso (e informativo) que lo que los catolicos (y musulmanes, e hindues, y...) piden para sus dogmas, la Compañía de Autobuses pida para cierta politica lingüistica...