sábado, diciembre 15, 2007

The Death And Life Of Great American Cities. Jane Jacobs.

Estoy leyendo "The Death And Life Of Great American Cities" de Jane Jacobs. La segunda página del libro ya me convence ("una ciudad es interesante si sus aceras son interesantes", "una ciudad es segura si sus aceras son seguras", "una acera es segura si hay gente a todas horas", "hay gente a todas horas si hay comercio y bares", "es bueno que en un barrio haya extraños") y me convence de que el libro me va a seguir gustando porque a la autora y a mí nos gustan los mismos barrios (los nuestros).

El libro es un clásico del urbanismo, data del año 60. Pero su crítica se puede extender sin problema a los PAUs actuales y a las manzanas fortaleza, esos bloques con jardín interior que parecen diseñados pensando que todos los viandantes son pederastas en potencia.

El libro expresa con claridad la importancia del Urbanismo, cómo marca la manera en que vivimos y cómo permite (o no) desarrollarse a la sociedad. Me parece curioso que lo único que nos importa en España sobre el urbanismo de nuestras ciudades es su legalidad en vez de su eficacia, como si la honradez fuera un buen sustituto de la competencia. Nos preocupa mucho saber si robó y cuanto robó el concejal, pero no dedicamos ni un segundo a pensar si el diseño de la ciudad es razonable o no. De hecho tenemos en tan poca estima el diseño de nuestras poblaciones que lo tenemos cedido a los ayuntamientos, en los cuales, por motivos puramente numéricos, escasea tremendamente la materia gris y la experiencia.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Que el urbanismo esté en manos de los ayuntamientos no creo que sea por razón de la poca estima al urbanismo, sino a la, aun menor estima que le tenemos a las perversas intenciones de la empresa privada. Mas que nada porque un Ayuntamiento puede lucrarse con el urbanismo, pero si le pillas y lo demuestras puede llegar a ser delito y puede ir algún testaferro a la carcel. En cambio que lo haga una empresa privada... pues no sólo no es delito, es lo natural, no?

Pero bueno, si tu interés es señalar esa contradicción del vulgo, que por una parte se echa a las calles animado por el afan consumidor y el disfrute de la vida en sociedad, y por otra tiende a proteger lo suyo, la privacidad y por consecuencia la separación de clases... pues sí, pero no creo que sea un defecto achacable a la hipocresía del vulgo, si no al sistema socioeconómico que nos mueve.

Pero antes de estos edificios fueron los chalets de los ricos. Que són como estos edificios que describes, pero unifamiliares. La solución a gran escala cual es, pues un jardín compartido, una piscina y un portero-guardia de seguridad con cámaras 24 horas al día, es decir ahora el lujo y los bienes no esenciales los consume to cristo, y no aquella burgesía que ahora son las anónimas clases altas (el anonimato y la discreción por razones obvias, con las normas de correción actuales no todos tienen el empaque de Rajoy a la hora de reconocer lo que ganan al mes).

Anónimo dijo...

Eso de que los bienes de lujo los consume to Cristo...

El subsidio social en Hamburgo es de unos 350 Euros al mes + costes de alquiler (8000 Familias estan amenazadas de desalojo por que la autoridad competente considera muy altos los costes de alquiler. Esto en una de las ciudades mas ricas del mundo). CErca de 200.000 tienen que intentar sobrevivir de este subsidio.
Algunos precios de articulos no de lujo:

Un billete de metro de un dia cuesta 8 Euros
El periodico cuesta 1-1,50 Euros al dia..
Una entrada al Zoo cuesta 15 por barba
Fruta y verdura para un mes para una familia de 4 cabezas cuesta ca. 100 Euros...
Comer pescado fresco 4 veces al mes (por debajo de las recomendaciones de vida sana) cuesta para una familia de 4 Personas ca. de 120 Euros...

Que lujo se puede permitir esta gente?
Polemarca, un poquito de sensibilidad, que tu tampoco vives en el lujo asiatico

Fabrique

Anónimo dijo...

Ciertamente.

Ese "To Cristo" me ha quedado demasiado amplio. Obviamente me refiero a esa amplia clase media consumidora, que muchas veces vive en este tipo de edificios y que destina buena parte de sus ingresos al consumo de esos bienes no esenciales... lujos para otros muchos.

De mileuristas hacia abajo se malvive en un mundo donde resulta una tortura diaria la exposición a los contínuos cantos de sirena de la maquinaria consumista.

Anónimo dijo...

No atribuyo la disfuncionalidad urbanistica de los suburbios al egoismo capitalista y tal y tal. Para mi, se debe puramente a la incompetencia de los arquitectos, de los concejales de urbanismo o de quien sea. Por ejemplo, nadie hace ascos a vivir en la calle Lagasca aunque no tenga portero climatizado interior.

En cuanto al precio de la vida, hombre, pues un subsidio social es un subsidio social, o sea, que no da para fundirselo en Rolex. Que tambien el consumo en bienes de lujo es relativamente alto, y no hay mas que ver el precio de las entradas de futbol o la cantidad de Mercedes que se ven por la calle.

Sobre el mileurismo, a mi mas que los mileuristas (muchos de ellos chicos jovenes que dentro de 10 años tendran su Mercedes) me acojonan los seiscientoseuristas, o sea, los inmigrantes, que sobreviven con casi nada olvidados del Gobierno y de todo.

[JR] dijo...

Soy de Republica Dominicana y estoy de acuerdo con que nuestros ayuntamientos solo le interesa el dinero y no saben nada del diseno y la planificacion urbana, carecen de ignorancia y por eso nuestras ciudades crecen con un desorden en cierto orden; Jacobs establece esto claro diciendo que para mejorar la planificacion de nuestras ciudades debemos mejorar la visual de las mismas, ademas que las aceras sirven de union entre diversos puntos como el comercio, y el uso como medio peatonal.